Balance de un fin de semana histórico

El pasado fin de semana, viernes incluido, pasará a la historia de La Guardia. Lo hará por la impresionante nevada caída entre los días 7 y 9 de enero, pero sobre todo lo hará por el apagón eléctrico que ha complicado sobremanera la vida de las personas durante prácticamente dos días. Dicho así, puede parecer poco, pero 48 horas sin energía eléctrica para una sociedad como la actual, donde todo depende de ella, es demasiado tiempo. Lo primero en acusarse fue la falta de iluminación, pero esto solo fue el principio, pues a continuación comenzaron a surgir problemas más graves: calefacciones, agua caliente, cobertura telefónica, puertas eléctricas, respiradores… las panificadoras no pudieron hacer pan y, a las pocas horas, las bombas de impulsión del agua corriente dejaron de funcionar y los grifos empezaron a languidecer. Un caos absoluto. Si a todo esto le sumamos los 50 centímetros de nieve en las calles, que las hacían intransitables, uno puede hacerse a la idea de la magnitud de la catástrofe. La estampa blanca ya no era tan bonita.

Sin embargo, durante todo este tiempo, ni el Ayuntamiento de La Guardia ni los muchos voluntarios que acudieron a su llamada permanecieron quietos. Desde el minuto uno se trabajó con la colaboración de Protección Civil en rescatar a las personas atrapadas en los coches, en traer sal para que no faltase en ningún momento para combatir los pavimentos helados, en hacer carriles en las calles para que la gente pudiera salir a la calle. Para esto se contó con muchas empresas y personas particulares del pueblo que arrimaron el hombro y lo siguen haciendo hoy. Todos remando en la misma dirección: facilitar la vida de los guardiolos.

Sin embargo, el asunto de la energía eléctrica seguía siendo el más preocupante. Desde la Alcaldía no se dejó de trabajar en coordinación con Gas Natural Fenosa Distribución, el 112 y las administraciones provincial y autonómica para recuperar el suministro. Las gestiones eran muy complicadas por la falta de cobertura, pero aún así hubo una comunicación constante entre todas las partes. El problema era que no se trataba de una única avería, sino de muchas y de muy difícil acceso a causa de la nevada. Una vez más, los agricultores y empresas locales aparecieron para ayudar a los camiones de las brigadas eléctricas a llegar a su destino y poder reparar las averías.

Tras casi 48 horas sin apenas detenerse para comer ni dormir, los operarios consiguieron restablecer el servicio eléctrico para la práctica totalidad del municipio a lo largo del domingo 10 de enero. Ahora toca seguir trabajando para evitar, en la medida de lo posible, la proliferación de placas de hielo, para mejorar la transitabilidad de las calles y permitir el acceso de camiones de reparto, para adecuar el centro médico, colegio y guardería, etc.

A partir de ahora, mucha precaución

Desde el Ayuntamiento aprovechamos para pedir prudencia, evitando desplazamientos innecesarios –tanto a pie como en coche- pues el hielo puede producir caídas y accidentes. Debe evitarse también transitar bajo las canales de los tejados pues hay peligro de desprendimiento de nieves o hielo. También se recomienda proteger los contadores de agua para evitar su congelación, así como las instalaciones que estén a la intemperie. Y sobre todo se pide paciencia para recuperar la normalidad, pues las características de la nevada han sido tan importantes que llevará algunos días de trabajo conseguirlo.

Agradecimientos

Por último, se quiere agradecer públicamente la labor colaborativa de las siguientes personas y empresas:

José María Potenciano

MGC Construcciones

Agroservicios Labrador

Romaje SL

Elvira Espada SL

Cooperativa San Juan Bautista

Tomás Marcos

José Esteban Manzano

Mario Orgaz

Mario Pasamontes

Nacho Martín Mejía

Rufino Molina

Luis Miguel Peláez

Alejandro de la Cruz Fernández

Protección Civil

Personal Laboral del Ayuntamiento de La Guardia

Puesto de la Guardia Civil